Y ya sin mas cuentos empezamos con el sexto día de ruta, Hoy comenzamos la ruta hiendo hacia el sur de Kyoto mas concretamente a Fushimi Inari.
Como siempre salimos del hotel temprano para aprovechar el día y pasamos por lawson para Comprar el desayuno y algunas tonterías raras que nos llamaban la atención, hoy me sentía intrépido y para desayunar cogí una especie de bizcocho de queso que de primeras me tenia expectante pero en cuanto lo probé me encanto con un zumo de piña ya estaba listo para empezar a subir monte.
Para llegar a Inari hay que coger el tren en la JR Kyoto station hacia el sur y bajar en la parada de Inari, como veis no hay mucha complicación ni en este trayecto ni casi en ninguno de los que hicimos con la JR también he de decir que el metro de tokyo pudo conmigo.
En Inari se encuentra el Fushimi Inari Taisha un santuario dedicado a Inari, protectora de las cosechas y de la buena suerte en los negocios, muy conocido por su belleza y por los miles de toriis que dibujan el camino hasta él.
Nada mas salir de la estacion a pocos metros encontrareis un torii enorme que es la entrada al santuario.
Una vez que entras al recinto, encuentras diferentes pabellones donde rezar y lanzar monedas, algunas tiendas de souvenirs, estaban llenas de toriis de distintos tamaños, incluso tenían altares para ponerlos en casa chulisimos, me hubiera gustado traerme uno.
No me acuerdo de donde, supongo que de la oficina de turismo que hay en la estación de Kyoto, saqué un mapa en el que entendí que el Go Honden estaba en la cima de la montaña, GRAN CAGADA, esta en la falda del monte.
De camino hacia la cima de la montaña ya no se veían extranjeros, solo japoneses que nos miraban con cara de extrañeza nos topamos con vistas impresionantes de kyoto, eso y que vimos zonas que quizá son menos visitadas por extranjeros fue lo que mereció la pena de la caminata que nos dimos.
Cuando llevábamos un rato subiendo le pregunte a una señora mayor que paseaba por los caminos del monte que si nos quedaba mucho y me miro como diciendo, que coño haces aquí y nos mando de vuelta hacia abajo.
de camino hacia abajo cogimos otra ruta para variar un poco y dimos con algo parecido a un santuario donde había unas estatuas de ranas.
Una vez en el tren de vuelta a kyoto nos dirigimos al Nijo Castle, desde la estación de de Kyoto cogimos el metro y nos bajamos en la parada de nijo. En la esquina de esa manzana frente a la esquina del castillo hay una tienda donde venden katanas, estrellas ninja, suriken y cosas así, muy recomendable de visitar.
"En 1601 Tokugawa Ieyasu, el fundador del shogunato Tokugawa ordenó a todos los señores feudales a que contribuyeran con las construcción del castillo Nijō. La construcción fue terminada durante el reinado de Tokugawa Iemitsu en 1626. Fue construido como la residencia en Kioto de los shogunes Tokugawa. Durante el shogunato Tokugawa la capital del país fue Edo, pero Kioto era donde se ubicaba la Corte Imperial"
Lo mas vistoso del castillo son los jardines ya que la parte interior de los pabellones no esta abierta al completo y no se ve demasiado.
Como es normal en casi cualquier sitio de japón abundaban las excursiones escolares pero esta vez tenían una misión, practicar ingles, y cada veinte metros nos paraba un grupo de escolares algunos solos y otros acompañados por un profesor y nos hacían un cuestionario ellos me preguntaban en japinglis y yo les contestaban en espaninglis no tengo muy claro que entendieron pero ahí quedó la cosa y nos trajimos una fotillo con algunos de ellos, algunos profesores tenían mas ganas de hablar que los alumnos.
Después de un tranquilo paseo por los jardines del castillo, por cierto increíbles, nos dirigimos a nuestro siguiente destino el Aoi matsuri, uno de los tres festivales mas importantes de Kyoto, se celebra el día 15 de Mayo. Sale del palacio imperial, pasa por Shimogamo Shinre y finaliza en Kamigamo Shinre.
Este festival se remonta a la época del reinado del emperador Kimmei (540-571). Japón fue azotado por malas cosechas y epidemias entonces el emperador envió a los templos de los dioses Kamo los embajadores imperiales para rezar a los dioses para acabar con los desastre.
Es muy vistoso ya que los trajes de época son muy pomposos ademas de coloridos y la cantidad de caballos y bacas tirando de carros hacen que el festival sea bastante largo contando con unas 500 personas ataviadas con ropajes del periodo Heian y unas treinta vestías.
¿Os ha gustado el recorrido por el sur y el centro de kyoto?
El próximo día una de ninjas y ciervos. Un saludo
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